Molino de Bolao - La Gándara y primera avería.
KM: 645
Lugares de interés: Molino de Bolao, Pto. Alisas, Collado de Asón, Mirador de La Gándara, Mirador de Aja, Pto. de Orduña.
Incidencias: Primera avería, cambio dañado no engranando la 1º, 2º y 3º
El día se desperezaba limpio y claro por todo el norte, así que perfecto para una ruta media que tenía preparada hacia el este. Como había muchos lugares que visitar, con el tiempo que se pasa recorriendo y visitándolos, había que quitarse los kilómetros de enlace lo antes posible y la mejor manera era por la autovìa del norte, que para eso ya está acabada. La primera parada sería para visitar el Molino de Bolao.
Molino de Bolao.
Dejo la A-8 en la Unquera para continuar por San Vicente de la Barquera, Comillas, Cóbreces (por donde también se puede acceder) hasta Toñanes. Serpenteamos por el pueblo hasta encontrar el letrero que indica el camino de bajada al abandonado molino. Entrando por esta zona no hay ningún sítio reservado para dejar los coches así que me alegro de tener la SuperTenere.
Preguntando a los lugareños que trabajan el campo en ambas orillas del camino, me indican que bajando encontraré un puente que atraviesa el "Arroyo de la Presa" y luego que continua por la senda.
Es un agradable paseo a una buena hora de la mañana, sin nadie se mezcle en tu contacto con la naturaleza.
Llego a la ruinas del molino pero en este momento me doy cuenta que estoy atrapado por un campo rodeado de cable electrificado. Siempre me he preguntado que reacción tendrá el cuerpo a tal descarga pero nunca quise saber su respuesta. Me lleva un rato encontrar la salida y que no es más que una portezuela con un sistema muy "sofisticado" para mantenerla cerrada y tener al rebaño en su sitio. Esto lo dejo para que el visitante lo investigue por su cuenta.
Aquí empieza la cascada y en el fondo estarían las turbinas del molino.
La cascada en invierno cuando el arroyo lleve más agua, debe ser un espectáculo.
Aquí es donde se mezcla en agua del mar con la del arroyo y no me queda muy claro si esas piedras están ahí de forma natural o se han colocado de barrera contra las embestidas del Cantábrico.
Los acantilados de la costa no te pueden dejar indiferente y la paz del entorno invitan a pararte y reflexionar.
Esta es la desembocadura del Arroyo que está guiado por estos gigantes que son los que forman los "Acantilados de la Molina". Desde lo alto se puede ver un solitario banco seguro perteneciente a un mirador que sus buenas vistas tendrá, pero eso será en otro momento.
Más adelante vuelvo sobre la A-8 hasta Solares donde empiezo a subir el puerto de Alisas.
Casi llegando al alto me doy cuenta que voy muy justo de gasolina hasta el próximo surtidor y aunque me marca que todavía tengo para 100km queda bastantes subida y puede ser engañoso, al ir en solitario hay que ser más precavido, así que doy la vuelta hasta la Cavada. Esto me permite subir esta segunda vez con más el recorrido ya sabido y la verdad es un puerto muy divertido.
A continuación subida al collado de Asón. Espectacular, pero los domingueros enlatados empiezan a acaparar la carretera.
Mientras estoy subiendo tengo que parar cada poco porque algo se me ha metido en el ojo izquierdo. En las paradas aprovecho para admirar el abrupto relieve modelado por un antiguo glaciar. Por momentos me empiezo a preocupar hasta llegar al extremo de que no lo puedo abrir. Conducir así se vuelve complicado y empiezo a plantearme dar media vuelta.
Estamos en el Parque Natural Los collados de Asón y podemos ver como coronando sus verticales los buitres leonado y águilas.
Mientras voy bajando hacia La Gándara veo como al fondo una oruga procesionaria va deslizándose por la carretera arriba, es un grupo de 6 BMW R1200 GS LC nuevas, full equip, del mismo color, sus insignia BMW las llevan pegadas por todas las partes, les saludo sin contestación. Está claro que son de otra especie.
Mirador Del Gándara
Un camino no asfaltado nos llevará hasta un pequeño parking. Estamos delante de un área de recreo, con mesas, sombra y mucho espacio para descansar de una buena ruta, pero que además nos asomará al rio Gándara que en este punto de desploma salvando un desnivel considerable para más adelante ir fluyendo por el valle del Soba.
El mirador es una estructura metálica que vuela sobre el barranco, con el suelo de rejilla y acristalado en los laterales dando la impresión de robusto y confiable, pero no puedo probarlo. Es superior a mis miedos, no compatible con el vértigo. Así todo, las vistas son increibles, tanto de la Cascada del Gándara, como del pueblo, el valle de Soba, y montañas del puerto de la Sia.
La cascada hay que visitarla antes de Abril para que lleve más agua, porque la verdad estaba muy escasa y sino fuera por al belleza en rededor tampoco nos sentiremos un poco defraudados.
Continuo y antes de empezar a bajar hacia el valle de Soba me desvío para ascender hasta Aja, donde nos espera otro mirador.
Llego al pueblo de Aja. Al poco de entrar veo el indicador que debería llevarme al mirador. Me detengo porque me parece raro que donde está la señal indica una caleya de un sólo vehículo, decidiendo seguir por ella con precaución. Llego a una bebedero con espacio para dar la vuelta y dejar el coche, pero decido seguir por el ahora ya camino. Tengo una trail y puedo. El camino empieza a llenarse de gravilla y enseguida me doy cuenta que por aquí sólo deben pasar tractores que se atascan en un barro después de las lluvias. No hay sítio para dar la vuelta así que gasssss .... pero la cosa se pone peor. Las rodadas solo te llevan a una pendiente realmente vertical. Con el gas constante y en alerta para que no se pare el motor, empiezo a subir escupiendo piedras y salvando regueros ahora secos. Me acuerdo del curso de conducción trail donde te enseña a que en estos caso nunca pararse en mitad de la subida porque sino el reinicio de la marcha sería casi imposible con el control tracción activado convirtiéndose la media vuelta en una solución peor con el abs activo. Así que me aprieto bien al depósito y lo que tenga que pasar, será. Por suerte consigo llegar a un cruce con lo que sí sería la carretera que debería llevarme al mirador.
Valle de Soba y abajo podemos ver el pueblo de Regules.
Por un momento me paro a pensar lo que he hecho y me arrepiento de la osadía porque al ir en solitario cualquier problema hubiera acabado en algo irremediable.
Descanso un rato junto a un ciclista que viene de Ramales de Victoria ( estos sí que tienen mérito) para continuar hasta el próximo punto de visita.
El cansancio empieza a pasar factura, Ambasaguas - Balmaseda - Amurrio. Me vuelve otra vez el dolor en el ojo izquierdo. Soy de hacer caso a las "señales" y esto es una "señal". Algo va a pasar pero decido continuar después de comprobar lo cerca que estoy del Salto del Nervión.
Después de Orduña me detengo en el pueblecito de Tertanga para contemplar la pared que salva el Puerto de Orduña. De noche, la abrupta pared debe parecerse a un tsunami provocado por una ola enorme, no lo quiero imaginar. El lugar me parece un poco siniestro. En lo alto está el Santuario de Nº Señora de la Antigua en el Pico del Fraile, que se accede a través de un sendero, lugar que lo anotaremos en pendiente.
La subida del puerto es muy divertida con constantes curvas a 180º y en ese momento no mucho tráfico. La carretera discurre por un frondoso bosque así que no hay muchos sitios para detenerse hasta llegar casi a la cima.
Desde este mirador se puede observar la orografía esculpida por la naturaleza salvaje dotándole de una característica especial al lugar.
La misma carretera nos llevará hasta la entrada del camino al Salto del Nervión. Me extraña que haya pocos coches y según indica el cartel de la entrada, se puede pasar por una pista de tierra hasta casi el mirador. Reinicio la marcha y noto que algo no va bien. El motor se cala notando como que no tengo potencia. Busco la 1º pero el pedal esta loco hacia esa posición. Un escalofrío aumenta la adrenalina y por más que miro la palanca da cambio no le encuentro ningún problema, tiene que ser algo interno. Mal asunto. Evalúo la situación, la distancia hasta casa, lo cerca que estoy de llegar al mirador ..... me entristezco. Tengo la posibilidad de volver a casa utilizando las marchas 5º y 6º , el resto han desaparecido, toca sufrir. La vuelta lenta, atento a cualquier ruido, evitando los semáforos y enfadado con migo mismo por no hacer caso a las "señales". Algo va a pasar en el lado izquierdo de la moto, lo sabía pero no lo quise reconocer....
17.511km en un año, primera y última avería.
Qué grande es la SuperTenere.
Nos vemos en la carretera.
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